Torcuato
Fernández-Miranda y Hevia, jurista, doctor, catedrático y
político. Nació en Gijón (Asturias) en 1915 y murió de un ataque
cardiaco en Londres (Reino Unido) en 1980 a los 64 años de edad.
Fue
muy relevante por su papel durante los últimos años de la dictadura
franquista y por haber sido profesor de Derecho
Político de Juan Carlos I.
Está
considerado uno de los tres artífices de la transición política
española, junto a Juan Carlos I y Adolfo Suárez. Desempeñó de
forma interina la Presidencia del Gobierno en diciembre de
1973, tras el asesinato de Luis Carrero Blanco.
Familia
Estuvo
casado con Carmen Lozana, y tuvieron ocho hijos.
Formación
Los
primeros años de Fernández-Miranda transcurrieron en Asturias.
Estudió en el Colegio de la Inmaculada de Gijón antes
de licenciarse en Derecho en la Universidad
de Oviedo con Premio Extraordinario. Obtuvo en Madrid el Doctorado en
la Universidad Complutense.
Docencia
Obtuvo
en la Universidad de Oviedo una plaza de catedrático de Derecho
Político siendo el catedrático más joven de España.
Entre
1951 y 1953 fue Rector de la Universidad de Oviedo.
Fue
profesor de Derecho Político, mentor y consejero del entonces
príncipe Juan Carlos, cuando ya había sido nombrado anteriormente
"sucesor en la jefatura del Estado con el título de rey".
Política
Torcuato
Fernández-Miranda se inició en política, porque el cargo de
rector le otorgaba el cargo implícito de ser procurador en
las Cortes franquistas.
Ocupó
diversas direcciones generales en los Ministerios de Educación y
Trabajo hasta alcanzar el cargo de Secretario
General del Movimiento —el partido único del
régimen del general Franco— entre 1969 y 1974.
Durante
el breve período en el que Luis Carrero Blanco ejerció
la presidencia del gobierno, Torcuato Fernández-Miranda ejerció
el cargo de vicepresidente. Tras el asesinato de Carrero Blanco
por ETA el 20 de diciembre de 1973, Fernández-Miranda pasó a
ejercer la presidencia del gobierno de forma interina durante 11
días.
Fue
nombrado por el rey presidente de las últimas Cortes franquista,
cargo que llevaba aparejada la Presidencia del Consejo del
Reino. Desde estos cargos pudo orientar al rey acerca de los
entresijos del sistema político postfranquista controlando y
desmontando, desde dentro, los resortes de poder que todavía tenía
el llamado "búnker".
Torcuato
fue partidario de reformar las Leyes Fundamentales del
Reino mediante sus propias disposiciones para llegar así a la
democracia evitando vacíos legales. En palabras del propio
Fernández-Miranda, se trataba de ir "de la ley a la ley a
través de la ley".
Torcuato
propuso al rey Juan Carlos tres candidatos para suceder a carlos
Arias Navarro en la presidencia del gobierno: Federico Silva,
Gregorio López Bravo y Adolfo Suárez.
Torcuato
fue el autor de la Ley para la Reforma Política (1976) que fue
el instrumento legal que permitió desmontar el régimen franquista
legalmente con la aprobación de las propias Cortes, nombradas años
antes por el general Franco, por lo que también fue conocida
como el "hara-kiri franquista". Con la aprobación de la
ley, se fijaron también las bases del sistema electoral actual.
Fernández-Miranda,
considerando que su labor ya estaba cumplida, presentó su dimisión
como presidente de las Cortes ante el monarca y este la aceptó. La
dimisión se haría efectiva tras las elecciones del 15 de junio de
1977, que configurarían una nueva asamblea.
Posteriormente
el rey lo designó senador en esas Cortes
Constituyentes.
Asociaciones
culturales
Admiraba
a Jovellanos y fue fundador del Ateneo Jovellanos de Gijón.
Reconocimientos
honoríficos
Como
premio a su inestimable labor, como símbolo de su mayor respeto y
consideración a su antiguo profesor, el rey le concedió el título
de duque de Fernández-Miranda.
En
junio de 1977 le nombró caballero de la Orden del Toisón de
Oro, máxima condecoración que concede el rey.
Autor: Feliciano Robles
No hay comentarios:
Publicar un comentario