Nicanor Piñole Rodríguez, pintor, conocido como Nicanor
Piñole. Nació en Gijón en 1878 y murió en Gijón en 1978 a
los 100 años de edad.
Su
obra puede adscribirse al post-impresionismo, sufriendo las lógicas
variaciones en el tiempo. Representa junto con Evaristo Valle lo
más destacado de la llamada “Escuela de Gijón” que junto con la
de Oviedo, es la más importante de Asturias.
Su
obra que, a pesar de mostrar una impecable técnica, fue ignorada
mucho tiempo, llegando el justo reconocimiento en edad avanzada.
Familia
Pocos
meses después de su nacimiento falleció su padre, el capitán de
Marina Mercante Nicanor Piñole Ovies, que se hundió con el vapor
Asturias frente a la costa de Tarragona, tras haber puesto a salvo a
toda la tripulación. De la primera época como pintor son una
espléndida serie de retratos de su madre Brígida Rodríguez
Prendes. Se casó con Enriqueta Ceñal Costales. Murió sin
descendencia
Formación
Estudió
el bachillerato en el Colegio de la Inmaculada, que estaba regentado
por jesuitas, y luego Bellas Artes en Madrid.
Inicios
como pintor
La
vocación de pintor arraigó en el artista desde muy temprana edad, a
los nueves años comienza a recibir las primeras clases de dibujo,
los jesuitas cultivaron su ya temprana afición por las artes
plásticas, por la cual despuntaba entre sus compañeros.
En
1892, con 14 años comenzó sus estudios en la Escuela de Bellas
Artes de San Fernando en Madrid allí obtuvo un premio de paisaje en
1897.
Ingresó
en el estudio de Alejandro Ferrant, donde entabló amistad con los
hermanos Valentín y Ramón Zubiaurre y Cristóbal Ruiz.
Estancia
en Italia
En
1900 se trasladó a Roma donde permaneció dos años, compartió un
estudio con Gili y Roig en Villa Straufera y fue asiduo del Círculo
Internacional de Bellas Artes. Las experiencias vividas en Roma y su
paso previo por París ejercieron una influencia determinante en su
obra.
Regreso
a Gijón
En
1902 regresó a Gijón, donde estableció su residencia definitiva,
alternándola con prolongadas visitas a Madrid, ciudad en la que
frecuentó tanto el Círculo de Bellas Artes, como las tertulias
madrileñas de renovación artística.
En
esos lugares madrileños, trabó amistad con figuras tan
representativas como Santiago Rusiñol, Ricardo Baroja y Miguel
Anselmo Nieto, entre otros.
Exposiciones
Por
esas fechas empezó a participar en diversas exposiciones locales y
nacionales, se presentó a la Exposición de Arte Moderno celebrada
en Roma en 1902, a la Nacional de 1904 y a la Internacional de Buenos
Aires de 1910, donde obtuvo una medalla de bronce.
El
tema central fue una maternidad recogida y melancólica en la que
Piñole dejó constancia de su opción estética.
Con
el retrato que pintó a su tío Manuel Prendes en 1914, obtuvo una
segunda medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1917.
En
la década de 1920 también envió cuadros a exposiciones en Estados
Unidos.
En
1928, su cuadro Estibadores fue incluido en las
exposición Un siglo de arte español posterior
a Goya, celebradas en
Bélgica y Holanda.
Participó
en la Bienal de Venecia de 1930 y en la exposición de pintura
española en Oslo.
Guerra
Civil (1936/39)
El
inicio de la Guerra Civil le sorprendió en Gijón, y ese suceso fue
la fuente de inspiración de sus cuadros “El refugio” y “La
retirada”. Al finalizar la Guerra Civil el pintor se retiró
definitivamente a Gijón, donde vivió junto a su madre, de la que
realizó un magnifico retrato en 1951. El final de la contienda marcó
el inicio de un periodo tranquilo y de aislamiento, dedicado a la
pintura, que se verá interrumpido en la década de 1950 por la
llegada del reconocimiento oficial.
Estilo
artístico
Cultivó
con asiduidad la pintura de paisaje al aire libre. Son obras pintadas
al óleo sobre cartón, en las que el soporte adquiere protagonismo
cuando la pincelada se alarga y aligera de materia, en contraste con
otras zonas en las que el trazo es más rico en empaste, corto y
dinámico.
A
partir de 1912, con motivo de sus excursiones al puerto de Tarna y
Pajares, comenzó a pintar sus primeros paisajes de montaña, tema
que será recurrente en su producción posterior y muy especialmente
después de la Guerra Civil.
El
retrato fue otro de los géneros que Piñole cultivó con mayor
asiduidad. Pintó en 1923, a petición del Congreso de Diputados, el
retrato de Melquíadez Alvarez.
Las
romerías y otras escenas de carácter popular, rural o marinero,
fueron abordadas por Piñole en obras de gran formato, en la mayor
parte de los casos concebidas para ser presentadas a las Exposiciones
Nacionales.
Principales
Obras
Estas
son algunas de las obras más significativas con las que Piñole
participó no sólo en las Exposiciones Nacionales, sino también en
los llamados frentes de vanguardia, como la exposición celebrada en
Madrid, en 1925, por la Sociedad de Artistas Ibéricos y las
promovidas por la Fundación Carnegie de Pittsburg en Estados Unidos:
-Marineros
en el puerto de Gijón, 1906,
-La
barraca, 1916
-De
promesa al Cristo de Candás, 1920,
-Recogiendo
la manzana, 1922,
-La
primavera, 1924,
-La
hija del patrón de 1925
-Estibadores
de 1927,
Reconocimientos
honoríficos
- En 1952 el Ayuntamiento de Gijón rindió homenaje a Piñole colocando un busto suyo en el parque Isabel la Católica junto al busto de su amigo el pintor Evaristo Valle.
- Recibió en 1952 también el nombramiento de miembro del Instituto de Estudios Asturianos.
- Fue condecorado con la Medalla de Oro al Mérito en Bellas Artes
- Le fue concedido el título de Hijo Predilecto de Gijón.
- La Diputación de Oviedo le otorgó el título de hijo predilecto de Asturias
- Fue condecorado por el Rey con la Gran Cruz de la Orden de Alfonso X el Sabio
Museo
Nicanor Piñole
El
Museo Nicanor Piñole es un museo monográfico consagrado al pintor
Nicanor Piñole, cuyo objetivo principal es dar a conocer su
trayectoria artística, haciendo especial referencia a su significado
en el contexto de la plástica asturiana y nacional.
La generosa donación de la viuda del pintor, Enriqueta Ceñal Costales, y el interés de las instituciones hicieron posible la creación de este museo que conserva entre sus fondos una importante colección de más de seis mil dibujos.
La generosa donación de la viuda del pintor, Enriqueta Ceñal Costales, y el interés de las instituciones hicieron posible la creación de este museo que conserva entre sus fondos una importante colección de más de seis mil dibujos.
Autor: Feliciano Robles
No hay comentarios:
Publicar un comentario